The disaster Artist: Obra maestra
Nicolás Tirado8.5
LO MEJOR
  • Una radiografía detrás de una “anti-película” que terminó siendo de culto por las razones incorrectas.
  • Gran sentido del humor; agrega al ridículo que de entrada ya tiene la obra subyacente
  • De destacar, la réplica meticulosa y detallada de las escenas de la película original, incluyendo vestuario y maquillaje. Impresionante.
LO MALO
  • Demasiado culto a “The Room”; no tiene demasiada opinión ni se aparta de la película.
8.5Notable

TÍTULO ORIGINAL: The Disaster Artist

AÑO: 2017

DURACIÓN: 1h 46min

GÉNERO: Comedia

PAÍS: Estados Unidos

DIRECTORA:  James Franco

ESTRELLAS: James Franco, Dave Franco, Seth Rogen, Alison Brie, Josh Hutcherson, Zac Efron, Jacki Weaver, Sharon Stone, Bryan Cranston

 

Ro es fácil para una película ser mala, tan mala, que termina siendo considerada una obra maestra por aclamación. Menos fácil encontrar una película de estas características que se convierte en una obra de culto. Al disgusto.

A este exclusivo club de obras pertenece “The Room” (2003), conocida como el Citizen Kane del mal cine. Una película que logró navegar el mar de la mediocridad y la irrelevancia (en el que se ahogan buena parte de las películas, incluyendo -digo con dolor- una cantidad apreciable del cine nacional), hasta encallar en las aguas bajas de la fama alcanzada por las razones incorrectas, al lado de obras maestras del desastre como Plan 9 from outer space.

The Disaster Artist pretende -y logra- ser los rayos X de The Room. Antes de proceder, eso sí, es necesario hacer claridad para los lectores de esta reseña -con el ánimo de que no se lleven la idea incorrecta- de que al momento de preparar estas líneas no me he visto The Room. Después de The Disaster Artist, creo que no me la puedo perder.

La historia del director/productor/actor principal (un personaje llamado Tommy Wiseau, interpretado magistralmente por James Franco, quien no requiere presentación) es una tragedia de alguna manera; la historia de un tipo lleno de plata, bruto pero decidido, cuya obstinación lo lleva a enterrar millones de dólares (6 según cuentas no oficiales, pues en realidad nadie sabe) en producir una película sobre una historia hueca, sin cupo para más clichés, con actuaciones lamentables (estelarizada, como no, por él mismo) y una puesta en escena digna de una obra de clausura de año escolar en un colegio, solo con el ánimo de demostrarle al mundo que él puede lograr su sueño.

Es de alguna manera la historia de más de una persona conocida, que -seguramente- inspirada por algún libro de autoayuda, tiene una injustificada fe en su talento y ve un tesoro en cualquier idea que se le ocurre, a pesar de que no tiene valor para nadie más. Por buenas razones.

El personaje principal (Wiseau) es cautivante/lastimoso, envuelto en un halo de misterio pues nadie sabe de dónde sale toda la plata que tiene, de donde es o cuantos años tiene. The Disaster Artist hace zoom a sus conflictos emocionales y a toda la complejidad psicológica y emocional que lo rodea, pero deja sin resolver la pregunta sobre el origen de éstos. Afirma ser de New Orleans, pero tiene acento de Europa del este…podría ser de Hong Kong en realidad y daría la misma.

Lo más interesante de la película es que a pesar de que tiene un final feliz en el sentido que los protagonistas logran su objetivo final (la fama), este triunfo no viene como consecuencia de su talento, sino un poco por lo contrario. El éxito los atropella de manera fortuita, accidental y a pesar de ellos mismos. Es de esta manera que la trama logra magistralmente evitar terminar en una historia de superación personal o en un drama épico inspirado en el american dream, para más bien hacerlo en una adulación al absurdo, reflejado en el culto a un producto de baja calidad.

No perderse los personajes de soporte que hacen el rol de voces sensatas alrededor del fiasco y la actuación de James Franco, quien se nota le pone el corazón a esta película. Gran énfasis en la relación entre los personajes principales y el impacto de toda la situación en la vida personal de Greg Sesteros (interpretado por Dave Franco, el hermano de James), que le da gran profundidad a la película.