Pride: orgullo y esperanza
Humberto Santana7
LO MEJOR
  • Una historia conmovedora que bien merece ser recordada y divulgada
  • Una película fresca y divertida
  • El uso de la banda sonora
LO MALO
  • El énfasis en generar sonrisas y divertir le resta profundidad al relato
7Buena

pride orgullo y esperanza aficheTÍTULO ORIGINAL: Pride

OTROS TÍTULOS: Orgullo y esperanza / Pride (Orgullo)

AÑO: 2014

DURACIÓN: 119 min

GÉNERO: Biografía, Comedia, Drama

PAÍS: Reino Unido

DIRECTOR: Matthew Warchus

ESTRELLAS: Ben Schnetzer, Monica Dolan, George MacKay, Bill Nighy, Andrew Scott, Imelda Staunton, Dominic West, Paddy Considine

 

En el valle de Dulais, sur de Gales, durante la huelga de mineros de 1984/1985, la más larga de la historia británica, un grupo activista de Londres donó más dinero a esta causa que ningún otro donante, junto con un mini bus marcado con su logotipo distintintivo: LGSM, Lesbians and Gays Support the Miners.

En una década en la que la homofobia era la norma, este pequeño grupo liderado por el activista Mark Ashton, convencido de la necesidad de luchar contra la opresión de las minorías, convencido de la necesidad de solidaridad, tomó un par de mini buses para llegar hasta esta apartada y oprimida comunidad minera para presentar sus donaciones, a pesar de la posible reacción de la opinión pública y, en especial, a pesar de la posible reacción de los mineros mismos. Los eventos que se desarrollaron a partir de esta iniciativa marcaron un hito sobre el significado de la solidaridad, de la amistad, de la tolerancia y de la resolución de diferencias.

 

pride secundaria real vs pelicula

A la izquierda, eventos reales (marcha); a la derecha la versión de la película.

Pride narra este episodio, y para hacerlo, el director Matthew Warchus, quizás a sabiendas de que esta historia basada en hechos reales es conmovedora por si misma, opta por dejar de lado la intención de enfatizar la cara dramática de esta crónica, matizándola con ese tono tan característico del drama-comedia británico, presente en grandes películas como Full Monty, Love Actually o Philomena, y explotado de forma más banal en películas como El exótico Hotel Marigold. Situaciones difíciles y tensionantes del choque cultural entre los dos disímiles grupos se solucionan muchas veces con humor, lo cual si bien le resta profundidad al relato, resulta innegablemente en una película fresca y divertida.

Íconos británicos como Imelda Staunton o el gran «pistolero» Bill Nighy hacen papeles de relevancia media, aunque correctos (al igual que los del resto del elenco), y es el protagonista Ben Schnetzer en el papel del líder Mark Ashton quien termina aportando el carácter y la energía a esta producción. Hay un muy buen uso de la banda sonora, que transporta a la escena musical de los 80, tomando temas que terminarían convirtiéndose en verdaderos himnos de la comunidad gay.

En esencia, aunque esta película pueda encasillarse en los «crowd pleasers«, es un enfoque fresco y divertido de una historia que sin duda merece ser recordada y contada.