Anthropoid

OTROS TÍTULOS: Operación Anthropoid

AÑO: 2016

DURACIÓN: 120 min

GÉNERO: Guerra, Thriller

PAÍS: Estados Unidos

DIRECTOR: Sean Ellis

ESTRELLAS: Jamie Dornan, Cillian Murphy, Brian Caspe

El cine de la segunda guerra mundial es un género trillado, sobre explotado y complicado para innovar a pesar de la rica retórica y del abanico de oportunidades que presenta para los cineastas. Entre los extremos del drama romántico hasta la sesuda critica sobre la ‘Solución Final’, median otras visiones que recaen sobre hechos específicos en los que  la historia universal no ha volcado la atención que merecen, quizá por la  magnitud de horrores que marcaron la segunda gran guerra de la humanidad o por la localidad de dichos acontecimientos. Estos sucesos nos han dado notables películas como ‘Operación Valkyria’ donde se relatan con exactitud los planes que se urdieron en los servicios secretos de diversas naciones, tanto aliadas como bajo control del Nazismo.

Operación Anthropoid narra uno de los momentos menos recordados por la historia universal, el atentado en república checa que acabaría con la vida de Reinhard Heidrich, el artífice de ‘La Solución final’ y uno de los más peligrosos y carniceros miembros de la cúpula nazi. Una historia más local donde se mezcla la fuerte represión nazi en Republica Checa que llevó a la muerte a cientos de miles de inocentes en las calles de Praga.

Quizá, una historia de tal calibre merecia más presupuesto y un poco más de inspiración.

Antropoid es una película solvente pero corta en ideas, con un enorme potencial entre manos  que se desecha por un tono frio y poco acertado. No obstante, el largometraje del novato Sean Ellis logra generar un empaque tenso apoyado en dos fantásticos actores principales como Jamie Dornan y Cillian Murphy, intérpretes de dos de los siete soldados checos encargados de asesinar a Heidrich en las frias y aterradas calles de la capital checa. Lamentablemente hacen falta elementos para que la obra trascienda y abrace el potencial de la historia real, como por ejemplo mostrar la oleada de terror que precipitó la llegada de Reinhard a Praga – y por la que fue apodado ‘El Carnicero de Praga’ –  para transmitirle así al espectador la sensación  de  odio del pueblo agredido hacia el gobernador nazi más allá del uniforme y la esvástica. Tampoco ayuda la producción de bajo presupuesto pues limita las opciones del director a entornos más cerrados y menos vistosos.

Pero a pesar de eso, Antropoid no peca nunca de perder fuelle. Su director solventa la falta de experiencia y presupuesto dando pantalla al duo principal. Dos actores sensacionales que encarnan la frialdad y el rencor checo – Cillian – y la humanidad de los espias en tiempos de guerra. Ambos están superlativos en pantalla y se desgastan progresivamente mientras la Operación continúa en medio del terror de quienes les rodean y la colaboración de la oprimida resistencia checa. Ambos trazan relaciones con habitantes de Praga hasta el punto de temer por sus vidas en una misión que desde el principio era suicida. Destaco especialmente a Dornan que sorprende y dota a su personaje de una faceta cada vez más insegura alrededor de la misión que están por cumplir, es creible y emotivo; un contrapunto perfecto para el resto del envoltorio.

A nivel de producción y escenografía, Antropoid es escueta y limitada pero su fotografía logra capturar la atmosfera fría de terror que se instauró en la Praga dominada. Los espacios cerrados son aprovechados como un recordatorio claustrofóbico en el que vivian los dominados. Es una pena que no fueran más explicitos en la persecución abusiva del nazismo a la población checa, así habría dado mejor preponderancia al enemigo imparable que enfrentan los protagonistas. Quizá con un mayor presupuesto podría haberse dado mejor una representación de uno de lo más siniestros personajes de la Segunda Guerra mundial como fue el carnicero de Praga.

Operación Antropoid es una película solvente que entretiene y permite a dos colosos interpretativos lucirse en una película de complicada acepción y bajo coste. Tambíen puede ser vista como una oportunidad perdida por falta de talento tras las cámaras y un presupuesto muy reducido. No obstante cumple con lo que ofrece de manera más que correcta y logra transportar un evento poco conocido y rara vez visto en el cine como el asesinato de uno de los personajes más fascinantes y monstruosos del entorno del nazismo alemán