Las horas más oscuras
Adriana Bernal Mor7.5
LO MEJOR
  • Indiscutiblemente la admirable actuación de Gary Oldman.
  • La escenografía y la ambientación de la época.
LO MALO
  • Más que calificarlo como negativo, podría decir que lo menos atractivo de la película es la linealidad de la estructura y de los hechos, aunque se entiende que va de la mano del hecho histórico y de lo que se quiere narrar.
7.5BUENA

 TÍTULO ORIGINAL: Darkest Hour

AÑO: 2017

DURACIÓN: 125 min.

GÉNERO: Drama

PAÍS: Reino Unido

DIRECTOR: Joe Wright

ESTRELLAS: Gary Oldman, Ben Mendelsohn, Kristin Scott Thomas, Lily James, Stephen Dillane,Richard Lumsden, Philip Martin Brown, Brian Pettifer, Tom Ashley, Jordan Waller,David Olawale Ayinde, Michael Bott, Danny Stewart, John Locke

 

 

La Segunda Guerra Mundial ha sido uno de los temas más explorados por el cine, dándonos casi cada año una película que directamente o en medio de su trasfondo vincula un tema que parece nunca acabar. Al fin y al cabo el cine es justamente un catalizador de emociones, sentimientos, pensamientos y vivencias que han marcado profundamente a las sociedades y  por ende este mágico espacio es el lugar perfecto para exteriorizar y recordar aquello que difícilmente puede borrarse.

En esta ocasión Joe Wright fue el encargado de llevar a la gran pantalla un capítulo de esta época, bajo la bandera de una apuesta cinematográfica colmada de detalles estéticos y narrativos que dejan muy claro el talento y singularidad de este director. No solo con películas anteriores como Orgullo y Prejuicio y Anna Karenina, sino también como codirector de la aclamada serie Black Mirror, Wright ha dejado muy en claro la capacidad que tiene para contar historias coherentes y llamativas, que cautivan en cierta medida por la precisión tanto de la estructura narrativa como de la atmósfera general y el contexto en la que ésta sucede.  Hay un cuidado especial por los protagonistas, su discurso, por el lenguaje corporal,  el ambiente, las épocas, el vestuario, la decoración, etc.

 

 

Bajo esta misma línea, Las Horas más Oscuras se convierte en una nueva apuesta al cine de época, esta vez teniendo como protagonista a uno de los actores más aclamados del mundo cinematográfico: Gary Oldman. Para mí, el plato principal de esta película es la excelente interpretación que hace de Winston Churchill,  pues el egocentrismo, rudeza, fuerza y sensibilidad de este histórico personaje son perfectamente explotados a través del inigualable trabajo de este  actor. Vale la pena decir que no deja de sorprender su capacidad de transformación, en esta ocasión con un papel que demuestra que no tiene límites físicos ni actorales, lo que genera expectativas sobre los nuevos retos que se pueden presentar en su carrera.

Pero, a pesar de que no puedo considerar esta película como una de mis favoritas entre las nominadas a los premios Oscar, es importante resaltar que Wright sabe atraer y sabe enganchar, proporcionando una historia que avanza, que crece, que aumenta en su ritmo y que por ello satisface al público.  Además, me pareció muy interesante la propuesta fotográfica, los movimientos de la cámara y los recursos estéticos, ya que se combinaron de tal manera que se podía sentir el relato del pasado con una visión mucho más contemporánea de lo cinematográfico e histórico.

 

 

Y más allá de generar una posición crítica y un análisis profundo de un hecho coyuntural en Europa, es una propuesta que enfoca absolutamente sus recursos en su personaje principal, porque aunque a su alrededor se desarrollan historias interesantes y personajes que aportan a la narrativa, al final el foco se establece en la grandiosa interpretación de Oldman, relegando un poco las historias paralelas que hacen parte del relato. Esto hace que en cierta medida en algunos puntos, cuando el protagonista desaparece, se pierda la fuerza y solidez que se sienten cuando Churchill domina la pantalla.

 

 

A pesar de ello, o mejor muy de la mano justamente de la propuesta narrativa, es una película que logra entretener, que mantiene atento al espectador en su evolución y que cuenta un hecho histórico relevante que indiscutiblemente da una nueva mirada a la historia mundial y a los personajes que la protagonizaron. Sin embargo, en mi experiencia podría decir que no marca muchas diferencias, no genera demasiadas sorpresas sino que más bien guía en un recorrido interesante y visualmente muy seductor. Es una película que se mantiene viva por su calidad fotográfica, de puesta en escena y por la inigualable actuación de Oldman, pero que muy posiblemente no pretende algo más que contar hechos históricos en una cronología coherente.