La monja
David Romero M5
LO MEJOR
  • Entretenida sin más
  • La unión con "El conjuro". Inesperada, para mi
LO MALO:
  • Se aparta mucho de lo que James Wan nos hubiese presentado
5Regular
Puntuación de los lectores: (4 Votes)
6.6

TÍTULO ORIGINAL: The nun

AÑO: 2018

DURACIÓN: 1h 36min

GÉNERO:  Terror, Sobrenatural, Misterio

PAÍS: Estados Unidos

DIRECTOR:  Corin Hardy

ESTRELLAS: Demián Bichir, Taissa Farmiga, Jonas Bloquet, Boonie Aarons, Ingrid Bisu, Charlotte Hope

 

La mercadotecnia lo ha vuelto a hacer. Nos hizo contar los días, hablar de religiosas satánicas y hasta cuando a un veto en redes sociales por afectar la tranquilidad de los cibernautas se llega es complejo no dejarse conquistar por la expectativa, aun cuando ya dentro de las salas La monja parece ser todo lo parecido a una mala pasada.

James Wan ha sabido construir un imperio alrededor de lo que se convirtiera en toda una revitalización del género con El conjuro y de ahí sus derivados. Ya desde El conjuro 2 y Anabelle: la creación, la sombra espectral de una agobiante novicia se venía introduciendo como una extensión más del “universo Warren” y, pues bien, aquí está.

Una abadía rumana en medio de la nada es el escenario elegido para que Corin Hardy dé rienda suelta a resabiados golpes de efecto, espectros deambulando en pasillos a vela y todo el cúmulo de clichés que hacen de La monja una clara decepción. Mientras Demián Bichir logra hacer apenas lo que el guion le pide, Taissa Farmiga (seriamente desaprovechada) lo secunda junto a un Jonas Bloquet encargado de aligerar la tensión con sus chistes rápidamente agotables convirtiendo a la cinta en un despropósito mayor.

Todo ello es reafirmado por una atmósfera que se vale de su composición casi caricaturesca para generar un agobio apenas existente que nunca acaba de encontrar el ritmo y, sobre todo una narración que la soporte. La buena intención que lleva consigo desde su inicio rápidamente se cae a cualquiera de las sepulturas a partir de un segundo acto que pretende hacer mucho pero no contar nada.

Nos levantamos de la butaca sin saber a ciencia cierta quién es Valak, la motivación principal de sus personajes, la seguridad de que otros spin-off (ojalá buenos) se vienen en lista y sin entender por qué esta película existe.